Técnicamente, somos blogueros

Recientemente leí una entrada del blog «Segunda Cita», manejado por el bloguero y cantautor cubano S. Rodríguez Dominguez, en el que se festejaba el segundo año de creación del blog. La historia de cómo se creó el sitio es bastante simple pero decidora (leer la historia aquí), y creo que casi todos tendrán una historia similar acerca de cómo se iniciaron en la blogósfera. Nuestro caso, creo, no es tan diferente. Y ya que, al menos técnicamente somos blogueros, mi recomendación de página web es un curso simple y básico de wordpress, que espero podamos seguir. No olviden de mirar los links, no se conformen con la página a la que los remito porque hay mucho más.

Y ya que somos blogueros creo que tenemos algunas cosas que discutir. Primero, la enciclopedia virtual nos dice que

«Un blog (en español, sin comillas ni cursiva,¹ también bitácora, cuaderno de bitácora, ciberbitácora o ciberdiario¹ ) es un sitio web periódicamente actualizado que recopila cronológicamente textos o artículos de uno o varios autores, apareciendo primero el más reciente, donde el autor conserva siempre la libertad de dejar publicado lo que crea pertinente.»

lo cual es cierto, pero que obviamente  no se agota ahí, tengo la sensación de que las posibilidades de construcción de este espacio virtual y colectivo son prácticamente infinitas. Razón por la cual yo lo quiero ver, por ahora y en estas circunstancias, como un kiosco de revistas. Cada usuario dueño de la suya propia, con sus propios criterios editoriales y estéticos. Es cierto que estamos en la prehistoria del asunto, pero por ahora no debemos desesperarnos. Tenemos, cada uno, una revista de música e internet, básicamente recomendaciones.

Segundo, si decidimos estar en internet, que lo hemos hecho, significa que estamos dispuestos a aceptar las reglas de ese espacio. Bien que las reglas en realidad son bastante abiertas y cambiantes (interacción líquida sería un creativo nombre para el siguiente bestseller de Bauman, si acaso no existe ya). Por ello propongo por ahora lo siguiente: que nos volvamos disponibles para el mundo exterior al blog. De hecho tenemos dos seguidores, de los que no sabemos nada, y ni siquiera hemos tenido la gentileza de devolverles la visita a sus respectivos blogs. Bueno, estoy pensando en algo más amplio. Invitar amigos, parientes, gente que pueda interesarle algo (no todo necesariamente) de lo que pasa aquí. Pero haciendo las invitaciones de forma anónima, y volviéndonos anónimos también (para poder disfrutar de la potencialidad del anonimato en la web). Lo cual implica conocer los riesgos que conlleva (trolls, spam, leechers, etc.) E informarse algo más acerca de lo que es un blog (en Wikipedia)

Tercero. Mi última recomendación, «Ya que vamos con guitarras» trataba sobre un guitarrista canadiense-parisino, cultor de la guitarra flamenca, integrador de ella con música tan diversa como la hindú o la colombiana (vallenato y cumbia) y exponente de la polémica world music. El tema es que las fronteras de los géneros actualmente existentes parecen desvanecerse en cuanto los medios técnicos de reproducción musical permiten poner en contacto a todo género con todos los demás, por remotos que sean. O al menos, ese es el tema que a mí me interesa: el tema de mi revista, para compartir con ustedes y con todos.

Eso me hace ver al blog como un potencial espacio de permacultura musical. Es decir, de permanente cultivo (más en el sentido agrícola que en el de esquisitez y alta cultura) de nuestros gustos musicales, por ahora, y estéticos en general. Conversaciones que siempre tenemos, que median cualquier relación entre humanos, y que seguiremos teniendo; pero que pueden adquirir una dimensión divertida e inabarcable aquí. Y que podemos hacerlo en casa.

Cuarto. He visto a veces al blog como el kiosco, como a una revista colectiva (tipo PijamaSurf, pero con otros temas), como el espacio de la permacultura musical y de muchas otras formas. También se me ocurre que puede ser un sitio lúdico, con juegos de internet. Pero de eso les cuento la próxima.

Para no alargarme aún más, voy directo a la recomendación:

Si Cook transita por Colombia, España, Cuba, Canadá, Francia, India y quien sabe dónde más, vamos de nuevo con guitarras. Pero esta vez con una de las estrellas fulgurantes en el firmamento del flamenco: El Cigala, hijo putativo de Camarón, y exponente respetadísimo de la música en España. Su página en Wikipedia, y su página oficial. Esa guitarra flamenca, tan acoplada a esa voz, se transforma en tango. El Cigala va a Argentina. Cigala y Tango es el último disco del Cigala, de ahí extraemos la siguiente recomendación. Esperemos en los comentarios encontrarnos no sólo con la confirmación de que el video fue visto, sino con comentarios reales acerca de que les parece esta forma de contacto gitano-argentina.

La canción es Garganta con arena, un homenaje al hito del tango Roberto «polaco» Goyeneche.

La presentación del disco en diferentes partes (tengan en cuenta sus contactos con otros músicos):

«Cigala & Tango incluye once clásicos del tango a los que El Cigala (Madrid, 1968) ha aportado su característico acento flamenco, de manera que temas de Gardel como El día que me quieras, Sus ojos se cerraron o Tomo y obligo) vuelven a inventarse. Las Nostalgias de Enrique Cadícamo cobran ahora ritmo de bulería y la célebre zamba Alfonsina y el mar se vuelve mestiza. El Cigala interpreta junto a Andrés Calamaro Los hermanos de Atahualpa Yupanqui y enriquece Youkali (Kurt Weill) con citas del Libertango de Ástor Piazzolla. El disco se abre con un tango reciente, Garganta con arena, que hasta ahora habíamos escuchado en la voz de Adriana Varela.

Después del éxito de Lágrimas negras (con Bebo Valdés) y Dos lágrimas, que giraban en torno al bolero, Diego El Cigala apuesta ahora por el tango. Al lanzamiento del disco le sucederá un DVD, que saldrá a finales de año, y una película documental (dirigida por Claudio Divella) que recogerá el encuentro de El Cigala con la cultura musical de Buenos Aires. El nuevo disco Cigala & Tango contará a partir de septiembre con distribución mundial a través del sello Deutsche Grammophon y será objeto de una gira internacional que incluye, además de España, otros escenarios de Europa, América y Asia.»

«Cigala & Tango fue grabado durante un concierto que Diego ofreció en el Teatro Gran Rex de Buenos Aires y en el que se aventuró por los caminos de la música argentina. Acompañado por importantes artistas argentinos como Andrés Calamaro, Néstor Marconi o Juanjo Domínguez (recomendación de mPsC) el cantaor madrileño revisitó en clave flamenca música de Carlos Gardel o Ástor Piazzolla. El álbum lo componen once temas que van del tango más clásico de Tus ojos se cerraron y El día que me quieras hasta las más contemporáneas, como Garganta con arena.»